El pasado 15 de junio, era la fecha marcada por Microsoft para dar la puntilla final a Internet Explorer tras 25 años de servicio.
El ‘software’ seguirá existiendo y funcionando, pero sin actualizaciones, mejora ni parches.
La compañía dejará de dar soporte a la última versión disponible del navegador, Internet Explorer 11, para ofrecer Microsoft Edge, su navegador actual.
El gerente general de Microsoft Edge Enterprise, Sean Lyndersay, dijo hace tiempo que «el futuro del Internet Explorer en Windows 10 está en Microsoft Edge». «Con Microsoft Edge, brindamos un camino hacia el futuro de la web sin dejar de respetar el pasado de la web. El cambio era necesario, pero no queríamos dejar atrás aplicaciones y sitios fiables y que aún funcionaran».
Sin duda, Microsoft Edge mejora la compatibilidad, la productividad y la seguridad que ofrecía Internet Explorer.